Y todavía hay más.

El fin de fiesta en la Playa fué espectacular, vimos las finales, un interesante partido de viejas glorias, nos codeamos con parte de la historia gloriosa de nuestro ahtletic, y encima nos llevamos unos cuantos regalos para casa, estupendo. No me imagino qué será el año que viene que nos toca a ganar.